
ANUARIO DE INVESTIGACIÓN ESCUELA DE COMUNICACIÓN MÓNICA HERRERA NÚMERO 5 AÑO 201170
Algunos Conceptos Clave
El individuo forma parte de un proceso de comportamiento, como consumidor, que gira en torno a la persona. Ésta
tiene ideas personales y estilos de vida basados en inuencias internas y externas que crean necesidades y/o deseos
para llevarla a tomar decisiones que les permitan satisfacerlas (os). Cada persona tiene un punto de vista de sí mismo
que se convierte en un concepto personal que se maniesta por medio del estilo de vida. Asimismo, nos guiamos
por una visión propia que está representada tanto por factores internos (emociones, valores, percepción, aprendizaje,
motivos y actitudes) como por factores externos (cultura, familia, amistades, subcultura, edad, tendencias). Según
la personalidad y estilo de vida, surgen diversas necesidades y/o deseos que nos conducen a la acción de compra.
Aunque ésta aparente ser un proceso lineal y mecánico, se puede ver afectada por un rápido análisis propio o de un
tercero que perjudique la percepción.
Si detallamos cada una de las inuencias (externas e internas) podemos armar que, por un lado, el elemento de
mayor peso de las inuencias externas es la cultura puesto que “es la totalidad compleja de conocimientos, creencias,
arte, leyes, moral costumbres y cualquier otra capacidad o hábito adquirido por los seres humanos como miembros
de la sociedad” (Hawkins, 2004, pág. 215); dicho concepto “incluye casi todo lo que inuye en los procesos de pensa-
miento y comportamiento de un individuo. Aunque la cultura no determina el carácter o la frecuencia de los impulsos
biológicos como el hambre o el sexo, inuye en sí, cuándo y cómo se graticarán dichos impulsos” (Hawkins, 2004,
pág. 215). Esto signica que el entorno de un consumidor no sólo lo inuencia, sino que determina su comportamien-
to ante la acción de compra. Por otro lado, las inuencias internas inician con la percepción: “proceso mediante el cual
los individuos reciben y adjudican signicado a los estímulos” (Hawkins, 2004, pág. 266), seguido por el aprendizaje,
memoria, motivos, personalidad, emociones y actitudes.
Los ejecutivos del marketing tienden a comunicar a los consumidores sobre el producto, es decir informarles de la
mejor manera posible los benecios o diferenciadores que tienen sobre los demás. Esto hace referencia al procesa-
miento de la información al que los consumidores están expuestos todos los días: “Es una serie de actividades por
medio de las cuales los estímulos se perciben, se transforman en información y se almacenan” (Hawkins, 2004, pág.
266). En dicho procesamiento cobra importancia la manera en cómo se utilizan los cinco sentidos, puesto que el
consumidor se ve persuadido, hoy en día, no solamente por un canal visual y auditivo sino también por el olfato, tacto
y gusto. Es importante destacar que el consumidor percibe los estímulos a través de los cinco sentidos. Según su nivel
de impacto, así será el nivel de recordación y delización. Dicho procesamiento de información se ve representado
por cuatro etapas, de las cuales las primeras tres constituyen la percepción.
La primera de ellas es la exposición que “ocurre cuando un estímulo entra en el campo sensible de nuestros nervios
receptores sensoriales”(Hawkins, 2004, pág. 266). Dicha etapa es la más determinante para una persona ciega y los
sentidos juegan un rol protagónico porque, como bien dice Lindstrom (2005): “El hecho es que la mayoría de los cin-
co mil anuncios, mensajes, súplicas de todos nosotros están expuestos todos los días y están basados en lo que vemos